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Conocido a nivel mundial por ser el impulsor de la cocina de vanguardia en EE.UU, Charlie Trotter falleció ayer en Chicago a los 54 años. Logró la fama con el restaurante que llevaba su nombre en Chicago, por el que consiguió dos estrellas Michelin, convirtiéndose en un icono de la gastronomía de vanguardia, no dejando de sorprender a sus clientes durante sus 25 años en activo. Nada más conocerse la noticia, numerosos chefs de todo el país lamentaron su pérdida. El alcalde de Chicago, Rahm Emanuel, declaró en un comunicado que «Charlie Trotter cambió para siempre la escena culinaria de Chicago. Su personalidad reflejaba su cocina: audaz, innovadora y siempre memorable. Siempre tendrá una mesa entre las figuras legendarias de la ciudad«. Trotter abrió su restaurante en 1987 revolucionando el concepto de alta cocina que hasta entonces se conocía en Chicago, de estilo tradicional y afrancesado, al introducir varias ideas que hoy se dan por sentadas en los restaurantes modernos. Entre esas novedades estaban la compra de productos directamente a pequeños proveedores locales, la preferencia por caldos ligeros frente a las pesadas salsas de nata y mantequilla que predominaban entonces influencia de la cocina francesa o dar protagonismo a la fruta y la verdura. Además, daba gran importancia al maridaje, llegando a diseñar platos para acompañar el vino elegido, y no al revés.
